Pues se dice y se escribe pronto: La Olla Vegetariana, ya cumple 8 años... ¡Qué increíble! Pero es cierto, y lo más cierto es que durante estos 8 años compartiendo recetas con vosotros han pasado muchas cosas, el blog y yo misma hemos ido evolucionando, siendo autodidactas, en este mundo blogueril, y por el camino hemos conocido y seguimos conociendo a personas virtuales maravillosas, entrañables, que siempre tienen un halago, una palabra amable y que te dejan un buen sabor de boca, y esas personas, no son ni más ni menos que vosotros, todos vosotros que venís a verme, leerme y comentarme cada semana. ¡Gracias de corazón, queridos bloggers, os quiero mucho!
Al principio era todo un poco caótico... en mi afán de publicar muchas recetas, para tener pronto contenidos en el índice, a lo mejor publica tres o cuatro recetas seguidas el mismo día, o una cada día de la semana, después hubo un tiempo que publicaba dos recetas a la semana y, por último, como hago en la actualidad una receta a la semana: ya sabéis #larecetadelosjueves
Además, tampoco tenía muy en cuenta el aspecto de las fotos, lo mismo las hacía de noche con luz amarillenta y horrible, como de día sin ningún tipo de "revelado", posterior... Tal cual salían así se quedaban y así eran subidas al blog. Y podréis estar pensando que lo importante, en un blog de cocina es que la receta sea fiable, que esté rica, que sea saludable y que al hacerla tengamos buenos resultados, pero os aseguro que el aspecto y la imagen de nuestros platos semanales y de nuestros blog, en este mundo tan competitivo y que cada vez va más en declive... es fundamental, ¿estáis de acuerdo?
Ya los blogs no están de moda, ahora lo que prima es la imagen audio-visual, la inmediatez de Instagram de Tik Tok... de Youtube, etc. Somos pocos y cada vez menos los nostálgicos a los que nos gusta leer recetas, compartir recetas y comentar recetas, ¿no creéis lo mismo? O soy solo yo la que ha notado que han bajado bastante las visitas semanales al blog y ya no os digo nada de los comentarios...
En fin, que mientras tenga ganas, motivación y deseos de veros todas las semanas, por aquí seguiré porque me gusta encontrarme con vosotros, y sobre todo me gusta compartir con vosotros mi cocina vegana, vegetariana y algunas veces, ovo-lacto-vegetariana, ¿me vais a seguir acompañando en esta travesía?
Bueno, una última cosita, no menos importante, antes de pasar a la receta. He de decir que esta receta no es mía... y diréis... vaya celebrar su cumpleblog con una receta copiada... pues sí, así soy yo y, sobre todo, porque esa persona me cae muy bien y hace una repostería que me encanta y tiene un blog, con unas fotos que admiro mucho. Es por eso, que he querido "emular" su receta para celebrar este día.
Ella es Isabel, del blog Cakes para ti y su receta es pastel de frambuesa y chocolate blanco... Yo lo hice al final a mi estilo, cambiando algunos ingredientes, pero el resultado me gustó mucho. Muchas gracias Isabel, por tu amistad y por este pastel, tan inusual, pero rico a la vez y, ante todo fácil. Tus fotos son más bonitas que las mías, pero he hecho lo que he podido... ya sabes que no estoy especializada en repostería como tú... jajaja!!
Ingredientes:
- 300 gr de fresas frescas.
- 3 huevos ecológicos.
- 100 gr de azúcar.
- 100 gr de harina blanca de trigo.
- Zumo de medio limón.
- Un poco de mantequilla o margarina para engrasar el molde.
- Azúcar glasé para decorar y unas frambuesas.
Preparación:
- PRECALENTAR el horno a 210º C, calor arriba y abajo.
- Con la minipimer BATIR las fresas hasta obtener un puré (podéis colarlo o no, para descartar las pepitas de las fresas).
- En un bol grande, BATIR el azúcar con los huevos hasta que blanqueen y tripliquen su volumen.
- INCORPORAR el puré de fresas y el zumo de limón.
- MEZCLAR muy bien, con movimientos envolventes.
- TAMIZAR la harina dentro de la mezcla y seguir mezclando con movimientos envolventes.
- ENGRASAR un molde de 18 o 20 cm. con margarina, mantequilla o aceite vegetal.
- ENHARINAR también el molde, si no es de silicona, para que no se quede adherido el pastel.
- HORNEAR durante 15 minutos a 210ºC, después bajar la temperatura del horno a 180 º C y seguir horneando hasta que esté cuajado, esto es, cuando al pincharlo el palillo salga limpio.
NOTA: no sé donde estuvo mi error, pero Isabel dice en su receta que se hornee por 10 minutos más, y estará listo, pero mi pastel, con ese tiempo aún seguía crudo, así que lo tuve que hornear por unos 40 minutos más, hasta que estuvo bien cocido por dentro... como podéis apreciar, en las fotos, la superficie tiene como muchos agujeros, pues son de cuando le metía el palillo para comprobar si estaba cocido... Creo que mi masa era demasiado líquida y al no poner el chocolate, se quedó poco consistente y al llevar poca harina... le costó cuajar bastante... en fin, que una serie de factores se unieron, para que tuviera que estar más tiempo en el horno, pero al final, salió riquísimo y con una textura entre pastel húmedo y tarta de queso, os lo aseguro, que nos gustó bastante.
Muchas gracias por estos 8 años de compartir cosas bonitas y seguimos viéndonos, la semana que viene. Besos a todos y cada uno de vosotros de los que seguís pasando por aquí.