La semana pasada la empresa de Conasi, vive la cocina natural, se puso en contacto conmigo para proponerme ser colaboradora suya. Me puse tan contenta que respondí inmediatamente que sí, pues me parece una forma estupenda de contribuir a difundir la alimentación sana, ecológica y de calidad.
Productos por cortesía de Conasi |
Ellos me han enviado un lote de productos que están a la venta en su página web, a cambio de que yo publique algunas recetas elaboradas con ellos y cuente mi experiencia, qué me han parecido y si los volvería a comprar. Sin duda alguna, todos los productos que ofrecen me encantan, pues ya había hecho una compra hace mucho tiempo en su página; adquirí el Spirali y algunas otras cositas, como semillas para germinar que me encantaron. Con esta estupenda maquinita he realizado algunas recetas que ya podéis disfrutarlas en el blog, desde hace mucho, como los spaghetti de calabacín o los de zanahoria.
Uno de los productos que había visto en su página y tenía muchas ganas de probar era la harina de teff, y fue, precisamente, de los que estaban incluidos en el lote. Así que aquí la tenéis recién abierta y dispuesta a convertirse en una deliciosa masa para quiche.
Imagen de Internet |
El teff es un cereal consumido desde hace cinco mil años en África por la población etíope. Se cree que su nombre deriva de la palabra "perdido" debido a su pequeño tamaño- tres mil granos sólo pesan 1 gramo, haciendo de este cereal el más pequeño del mundo.
Lo más importante de la harina de teff es que no contiene gluten, por lo que es ideal, combinado con otras harinas, para realizar repostería, postres, pizzas, o tartas vegetales, como ha sido hoy mi caso, para personas con intolerancia al gluten o celíacos.
Esta quiche me ha fascinado desde el primer mordisco, pues la masa está espectacular de sabor, aunque la textura al hacerla no sea la normal a la que estamos acostumbrados; pues es una masa quebradiza, pero a su vez fácil de amoldar con las manos. Os animo a ir introduciendo de vez en cuando en vuestras dietas estos productos quizás tan insólitos, pero a la vez tan beneficiosos para nuestro organismo.
Lo más importante de la harina de teff es que no contiene gluten, por lo que es ideal, combinado con otras harinas, para realizar repostería, postres, pizzas, o tartas vegetales, como ha sido hoy mi caso, para personas con intolerancia al gluten o celíacos.
Esta quiche me ha fascinado desde el primer mordisco, pues la masa está espectacular de sabor, aunque la textura al hacerla no sea la normal a la que estamos acostumbrados; pues es una masa quebradiza, pero a su vez fácil de amoldar con las manos. Os animo a ir introduciendo de vez en cuando en vuestras dietas estos productos quizás tan insólitos, pero a la vez tan beneficiosos para nuestro organismo.
Ingredientes:
Para la masa
- 120 gr de harina de teff ecológica.
- 120 gr de harina de almendras.
- 1 cucharadita de sal rosa del Himalaya (o sal marina).
- 1/2 cucharadita de hierbas provenzales secas.
- 1/4 cucharadita de pimienta negra molida.
- 80 ml de aceite de oliva virgen extra (primera prensada en frío).
- 60 ml de agua mineral con gas muy fría.
Para el relleno
- 1 taza de hummus casero.
- 1 cebolla roja a juliana.
- 1 berenjena a medias lunas.
- 15 o 16 tomates cherrys, cortados por la mitad.
- Aceite de oliva, sal y orégano seco.
Preparación:
- 1 berenjena a medias lunas.
- 15 o 16 tomates cherrys, cortados por la mitad.
- Aceite de oliva, sal y orégano seco.
- Comenzamos haciendo la masa: en un bol grande mezclamos la harina de teff, la harina de almendras, la sal y las hierbas provenzales. Mezclamos y reservamos.
- En otro bol pequeño mezclamos el aceite y el agua mineral con gas y batimos con un tenedor hasta que la mezcla sea blanquecina y más densa.
- A continuación, vertemos el líquido sobre los secos y mezclamos con un tenedor. Después usamos las manos hasta formar una masa, La masa en este punto no tendrá una consistencia homogénea, sino que parecerá desmenuzable, y esto es exactamente lo que buscamos.
- Ponemos la mitad de la masa en un molde de tarta sin engrasar con un fondo extraíble o en un molde como el mio de cristal y un papel de horno, para después poder sacar mejor la tarta.
- Entonces, suave y uniformemente, presionamos la masa en el molde con la mano, hasta los bordes. Cuando necesitemos más masa para reforzar un lado de la tarta o para remendar un agujero, simplemente ponemos un poco más en el molde. Cuando la base para la tarta esté preparada, la pinchamos con un tenedor y ya la podemos hornear.
- Horneamos la base de la tarta durante 12 minutos a 200º C. Se pueden producir algunas grietas, pero eso es normal. Dejamos que la masa se enfríe un poco y ya la podemos rellenar.
- Para rellenarla untamos una capa de hummus sobre la base de nuestra quiche y encima iremos poniendo las verduras que, previamente, habremos salteado una a una y por separado en una sartén a fuego fuerte con un poco de aceite y orégano. Esta cantidad de verduras quizá sea mucha para vuestra quiche, pues mi molde, al final, se quedó un poco pequeño, pero si os sobran verduras salteadas estarán deliciosas para combinar en una ensalada o en cualquier otro plato.
- Una vez que tenemos la tarta o quiche rellena, ya estará lista para comerla, o bien, la podemos introducir unos 5 o 10 minutos en el horno para que se caliente bien y disfrutarla.
Esta receta está adaptada del blog Beard & Bonnet.