QUESO CRUDO- CURADO DE ALMENDRAS |
Para mí el poder hacer un sucedáneo de queso, a partir de frutos secos, ya sean almendras, anacardos, nueces o semillas como las de girasol o calabaza, por ejemplo, es todo un invento CULINARIO con mayúsculas. Pero, no quiero que te lleves a engaño, porque no soy mentirosa... queso, lo que se dice queso no es, pero se aproxima bastante, en textura, aroma y sabor, te lo puedo asegurar. Es un queso libre de láctosa, libre de grasas trans y libre de gluten. Es un producto totalmente natural, hecho desde cero en tu propia cocina y, es un producto, en el que vas viendo día a día los cambios tan maravillosos, casi mágicos de transformar unos humildes frutos secos en queso vegano. Sinceramente, me parece sublime y alabo a quien lo inventara, pues es un acierto, seguro.
QUESO CRUDO- CURADO DE ANACARDOS |
Estos que os muestro hoy los hice a partir de anacardos y almendras activadas (esto es, puestas en agua durante unas 8 horas) y rejuvelac, sí, ese líquido turbio que no te gustó demasiado cuando lo viste por primera vez, pero he de decirte que, de momento es el mejor fermento que he descubierto para llevar a cabo este tipo de quesos.
El de anacardos me gustó más que el de almendras, pero creo que fue porque el anacardos es un fruto seco más untuoso y se bate mejor a la hora de hacer la masa de nuestro queso; no quiero decir con esto que el de almendras no estuviera rico, que también, sino que las texturas y el resultado final fueron diferentes. No obstante, voy a seguir practicando para conseguir el resultado final óptimo, o que a mí más me agrade.
El de anacardos me gustó más que el de almendras, pero creo que fue porque el anacardos es un fruto seco más untuoso y se bate mejor a la hora de hacer la masa de nuestro queso; no quiero decir con esto que el de almendras no estuviera rico, que también, sino que las texturas y el resultado final fueron diferentes. No obstante, voy a seguir practicando para conseguir el resultado final óptimo, o que a mí más me agrade.
Me fascina... ponerme manos a la obra en mi labor quesera. Es casi alquimia, mágica en la cocina... estoy totalmente enganchada a estos queso, o mejor dicho, más que a ellos... a su elaboración; a todo el proceso de fermentado, curado, secado... hasta que llega a mi boca y puedo disfrutar de gusto.
¿Y tú te atreves a probarlos, te vez capaz de hacerlos?
Ingredientes:
- 2 tazas de anacardos o almendras remojadas.
- 1 taza de rejuvelac.
- 3 cucharadas de levadura de cerveza en copos.
- 1 cucharada de zumo de limón recién exprimido.
- 1 cucharadita de sal.
REJUVELAC |
Preparación por pasos:
PASO 1
- Activación: Remojamos 2 tazas de almendras (sin piel) durante 8 horas.
PASO 2
- Procesado: En el procesador de alimentos o con una batidora de alta potencia, batimos las almendras remojadas y enjuagadas con 1 taza de rejuvelac (la receta la tienes en el enlace). Debemos obtener una pasta bien suave y sedosa, sin grumos, a ser posible.
PASO 3
- Fermentación: Dejamos fermentar la pasta envuelta en una gasa de algodón bien limpia, yo tengo una exclusivamente para esto. La gasa la colocamos dentro de un colador, y éste en un recipiente, para que drene el suero al ir fermentando. Este proceso puede durar de 1 a 3 días, depende de la época del año en que estemos. En verano con unas 24 horas, casi estará listo, sin embargo, en invierno, por las temperaturas más bajas le cuesta más fermentar y quizás necesitemos más de 48 horas. De todas formas es bueno ir revisando. ¿Cómo saber que la mezcla está fermentada? Tan fácil como ver que el aspecto es más compacto y esponjoso, con microburbujitas en la superficie y, también, por el olor: ya huele a queso fermentado.
FASE DE FERMENTADO |
PASO 4
- Curado: este proceso es el más largo. Una vez fermentada la pasta de frutos secos con el rejuvelac, debemos mezclarla con la sal, la levadura de cerveza en copos y el zumo de limón (este último es opcional, pero muy recomendable). Formamos nuestros quesitos, ya sea con las manos o con aros para darle forma redonda y los envolvemos en papel vegetal. Para el proceso de curado se puede hacer de tres formas:
- Uno, acelerando el proceso de curación externa en el deshidratador con una temperatura constante de 35º C, de 24 horas, dándole varias vueltas. No lo dejes más de 24 horas, pues si no se volverá demasiado ácido el sabor. Después de ahí, lo sacas, lo envuelves en papel vegetal y directo al frigorífico donde seguirá el proceso de curación, el tiempo que tú quieras, dependiendo el grado de madurez que quiera. Pueden ser unos días, o incluso meses.
- Dos, a temperatura ambiente, sobre una rejilla en la encimera, dándole la vueltas cada día, para que se se seque igual por todos lados. Siempre envuelto en papel vegetal. Tardaremos de 2 a 3 semanas, depende de lo curado que te guste. Incluso puede estar meses.
- Tres, en el frigorífico, en la parte de arriba, donde normalmente hace menos frío. También debe estar siempre cubierto por el papel vegetal y lo debes girar cada 12 o 24 horas. Tardaremos de 2 a 3 semanas, depende de lo curado que te guste. Incluso puede estar meses.
FASE DE CURADO |
Ante de curarlo o estacionarlo, cuando le hayas dado la forma lo puedes saborizar con alguna hierba o especia, yo dejé uno al natural, otro lo rebocé con orégano y el tercero lo embadurné con pimienta negra. En la etapa de curación el tiempo y nuestro cuidado harán su labor para obtener el producto final.
Es un proceso fácil, aunque no te creas... o aunque te parezca complicado... lo más tedioso, quizás, sea tener que esperar a que nuestro quesitos fermenten...
Las fotos de este post están tomadas en distintos días, a distintas horas y con distintos quesos. El que veis más curado es de anacardos: MI PREFERIDO, SIN DUDA. El menos curado o, curado durante menos tiempo, es de almendras.
Deseo que te animes a probar este tipo de quesito son ricos, aromáticos y sobre todo hechos en casa con ingredientes de óptima calidad.